Recomendaciones HQV

NO LE DIGAS A NADIE
(Por Ramiro San Honorio)

Puntaje HQV:






Adaptado del bestseller del estadounidense Harlan Coben, NO LE DIGAS A NADIE (2007) es un trhiller de perfecta factura. El sentimiento de un gran romance ajustado con el tono de ferviente suspenso que no da tregua, es el resultado del trabajo impecable de Guillaume Canet (recordado en Colombia por el protagónico deJuntos, Nada Más, con Autrey Tatou).
Todo funciona en la película como piezas de un exacto reloj. El increscendo va dejando a la audiencia sin respiro, mientras todos le hacemos ‘barra’ al atormentado Alex, cuyo único objetivo es recuperar el amor y descubrir el por qué se interrumpió su vida de un momento a otro.


Título original: Ne le dis à personne / Tell No ONe
Drama, suspenso, romance, 12 años, Francia, 2006, 125 min.
Director y guionista: Guillaume Canet
Intérpretes: François Cluzet (Dr. Alexandre Arnaud Veck, ‘Alex’), André Dussollier (Jacques Laurentin), Marie-Josée Croze (Margot Beck), Kristin Scott Thomas (Hélène Perkins), Nathalie Baye (Elysabeth Feld-man), François Berléand (Eric Levkowitch), Jean Rochefort (Gilbert Neuville), Marina Hands (Anne Beck), Gilles Lelouche (Bruno), Philippe Lefebvre (Comandante Philippe Meynard), Florence Thommasin (Charlote Bertaud), Olivier Marchal (Bernard Valenti), Guillaume Canet (Philippe Neuville), Brigitte Catillon (Capitán Barthas), Samir Guesmi (Comandante Saraoui).
Productor: Alain Attal. Cinematografía: Christophe Offenstein.Edición: Hervé de Luze. Casting: Brigitte Moidon. Música: Mathieu Chedid.



Se aman desde niños. Es un sentimiento que ha florecido en medio de las circunstancias de crianza. Desde entonces saben que serán por siempre el uno para el otro. Lo que no imaginan, es que se atraviese la desgracia.

En un idílico viaje hasta el mismo lago que colinda con el árbol en el cual grabaron sus nombres en medio de un corazón, una noche de luna y aguas apacibles donde nadan desnudos, el infortunio aparece.

Un grito azaroso, una angustia repentina, un nadar frenético hasta la orilla de donde viene el llamado de auxilio de su amada Anne, llevan a Alex hacia dos golpes secos que lo dejan inconciente en medio de las aguas. ¿Qué habrá pasado?

Luego, dramáticas imágenes nos muestran que en apariencia, Anne murió, y un inconsolable Alex trata de sobrellevar el martirio que significa su funeral. La desgracia toca nuestro corazón, mientras la pantalla nos muestra lo endeble que a veces resulta la existencia.

Ocho años después, Alex no ha logrado resignarse a la pérdida, y a duras penas encuentra alivio en su trabajo como pediatra. La ‘mujer’ de su hermana, lo insta a que se sacuda el dolor. Como un martirio programado, cada año Alex conmemora la triste e inesperada partida de su mujer.

De repente, una inusitada esperanza regresa con un e-mail que le muestra una imagen de Anne mirándolo fijamente, a la entrada del metro de París. El texto le sugiere que continúa con vida, pero que hay un peligro inminente si él lo revela a alguien. No le Digas a Nadie, es la condición básica para retomar la felicidad perdida.

Al tiempo, la policía empieza a increparlo por el supuesto asesinato de Anne. Luego de ocho años, vuelve a ser sospechoso.

Entonces los espectadores se ven inmersos en un vertiginoso torbellino de emociones. Si Anne está viva, ¿por qué ha desaparecido durante tanto tiempo? Y si fue su propio padre, el encargado de identificar el cadáver (mientras Alex estaba en coma por los golpes recibidos en el lago), entonces… ¿a quién pertenece el cuerpo cremado con tanto dolor de familiares y amigos?

Adaptado del bestseller del estadounidense Harlan Coben, No le Digas a Nadie es un trhiller de perfecta factura. El sentimiento de un gran romance ajustado con el tono de ferviente suspenso que no da tregua, es el resultado del trabajo impecable de Guillaume Canet (recordado en Colombia por el protagónico de Juntos, Nada Más, con Autrey Tatou).

Todo funciona en la película como piezas de un exacto reloj. El increscendo va dejando a la audiencia sin respiro, mientras todos le hacemos ‘barra’ al atormentado Alex, cuyo único objetivo es recuperar el amor y descubrir el por qué se interrumpió su vida de un momento a otro.

Una de las mejores películas de suspenso de los últimos años, tiene la fortaleza además, de llegar a cualquier tipo de público. No se la pierda.



Guillaume Canet tiene 33 años. A lo largo de su trayectoria artística se ha desempeñado básicamente como actor. No le Digas a Nadie es apenas su segunda película como realizador, pero el resultado ha superado las expectativas. Al punto que en la pasada entrega de los premios César y frente a cineastas más experimentados, el joven Canet obtuvo el reconocimiento como mejor director.

Basada en la novela homónima Tell no One del estadounidense Harlan Coben, No le Digas a Nadie cuenta con adecuado ritmo narrativo, apropiada dosis de suspenso, personajes bien delineados y estupendamente caracterizados. Es, en resumen, una suerte de thriller romántico muy bien realizado.

El extraño mundo de Charlie


Críticas HQV para ver antes de ir al video: "Todas las vidas, mi vida" (o Synecdoche New York) de Charlie Kauffman, con Phillip Seymour Hoffman.

Síntesis: Caden Cotard (Phillip Seymour Hoffman) es un director de teatro obsesionado con la muerte cuya vida cambia rotundamente cuando su esposa y su hija lo dejan. Mientras tanto, gana un prestigioso premio que le permite hacer la obra más compleja y real que haya hecho: la de su propia vida.

A favor: el guionista de joyas como "Quiéres ser Jhon Malkovich" y "Eterno resplandor de una mente sin recuerdos", hace su debut como director con su obra más compleja y profunda. Synecdoche... (palabra que quiere decir algo así como "una cosa que representa un todo") es una peli extraña que nos hace reflexionar sobre la vida y la muerte. Llena de simbolismos metafóricos y momentos desconcertantes - tal como se esperaba de un autor tan brillante como original - "Synecdoche..." nos ofrece una obra dentro de una obra, donde la ficción se confunde con la realidad. Una de esas pelis que si la ves, difícil que te puedas olvidar.

En contra: Cuando a Charlie Kauffman le dieron luz verde para encaminar el proyecto, tendrían que haberle puesto algún límite. Alguien que le dijera: "me parece que acá te pasaste...". Pero no, el director y guionista hace con esta historia literalmente lo que quiere. En un primer momento el relato es atrapante, pero rápidamente - una vez que todo cambia para su protagonista - comienza un desfile de escenas rebuscadas que solo se mantienen por la grandeza de Phillip Seymour Hoffman, quien hace lo que puede por darle coherencia al mundo creado para y por su personaje. Una película rebuscada, con excesiva creatividad. Un director que indagó demasiado profundo en su mente y terminó enloqueciendo tanto como su protagonista.

Veredicto HQV: ideal para quienes quieran encontrar algo alejado del cine clásico y pochoclero; mala idea para aquellos que busquen un digno entretenimiento. Un claro ejemplo de que la suma de los factores - actores y director - no hace al todo.

Puntaje HQV (sobre 5): 3

Año uno (Risa cero)

Anti recomendación: Jack Black (Escuela de Rock) + Michael Cera (Supercool) + Harold Ramis como director (El día de la marmota) + Judd Appatow como productor (Virgen a los 40, Supercool)... qué podría salir mal?

¡Todo! "Año uno" es una comedia sin gracia que nos transporta a los comienzos de la civilización. La ¿gracia? consiste en ver cómo estos dos inadaptados se meten en más y más problemas, llegando hasta situaciones absurdas. "Año uno" es completamente artificial e insípida, y no consigue sacarnos siquiera una sonrisa con las morisquetas de Jack o la cara de looser de Michael. Culpa de los actores? Culpa del director? Culpa del guionista? Sí. Aquí todos funcionan mal.

Si estás en el video en algún momento, ves la tapa y pensás "uy es el pibe de Juno y el gordito de Una guerra de película, esto promete..." CUIDADO! Lo que podía llegar a ser una buena tarde de domingo para reírse un rato, puede volverse un gran aburrimiento.

Hoyqueveo.com. Por un mundo sin películas decepcionantes.