"After Earth", de tal palo tal astilla
Por Ezequiel Iandritsky
La historia
Los desastres ecológicos y bélicos actuales han llegado a su punto máximo. El planeta tierra ha quedado inhabitable. La humanidad vive ahora Nova Prime, un lejano planeta que recuerda a bastante a Marte. Pero hay un problema: los extraterrestres (a quienes no conoceremos en todo el film) han soltado a unas horrendas criaturas asesinas llamadas Ursa que cazan humanos "viendo" las feromonas que expedimos a causa del miedo. El general Cypher Raige (un Will Smith siempre carismático y rendidor) es uno de los únicos que ha logrado vencer el miedo y por lo tanto ser invisible para los Ursa: un fenómeno conocido como "Ghosting" ("fantasmear"). Cypher es un héroe nacional admirado por todos, pero más que nadie por su hijo Kitai (su hijo en la vida real, Jaden Smith), quien sueña con convertirse en comandante. Algo que no podrá alcanzar hasta que logre controlar sus emociones. El problema surge cuando la nave en la que viajan padre e hijo debe hacer un aterrizaje forzoso en la ahora peligrosísima Tierra. Pero la nave choca y queda dividida en dos mitades, muy separadas una de la otra. Ellos serán los únicos sobrevivientes. Con su padre inmovilizado, Kitai deberá atravesar varios kilómetros para hallar un transmisor que significará su vuelta a casa. Pero para eso deberá enfrentar a los animales - que ahora han evolucionado a temibles depredadores - y a una Ursa que ellos mismos han traído en su nave.
A favor
Realmente encuentro inentendible el vapuleo unánime que ha recibido M. Night Shyamalan (de joyas como "Sexto Sentido", "La aldea" y "El protegido"; y faltas de respeto como "La dama en el agua" y sobre todo "The Happening") por su última película. El planteo de la historia (creada por el propio Will Smith y guionada por el propio Shyamalan) es cuanto menos interesante y correctamente ejecutada. Hacía tiempo que no veía un Blockbuster de ciencia ficción en que la trama de los personajes por primera vez ¡importe! Más allá de la trama de acción (recuperar el radio para salir vivos), la historia interna de sus protagonistas es lo que mantiene vivo al relato. Con un par de escenas y un gran poder de síntesis, de entrada se nos presenta el conflicto principal a resolver a lo largo de la aventura: un padre que por haber perdido el miedo también ha perdido la capacidad para sentir y relacionarse con su familia - con su hijo especialmente - y un hijo que idolatra al padre y debe aprender a controlar sus emociones; ambos deberán aprender del otro uniéndose por primera vez para sobrevivir a la Tierra. Con esa premisa sencilla la historia nos va trayendo y llevando por distintas emociones en un relato tan redondo y simple como eficaz. También encuentro inentendible que la cinta "Oblivion" (también de este año, de no pocas coincidencias con este film) tenga el OK popular con la promesa Tom Cruise interpretando a ¿sí mismo? en acción constante, y en cambio la entrega de una telenovela brasilera hecha película de ciencia ficción . En cambio, After Earth plantea un relato con el que nos podemos sentir identificados y al mismo tiempo nos ofrece varias escenas de acción muy logradas. El enfrentamiento final con la temible Ursa logra transmitirnos ese miedo que debe superar el pobre Kitai. Los flashbacks de el general Raige (derivado de "Rage": amo esa capacidad de los norteamericanos para inventar apellidos con palabras que describen al protagonista) con respecto a la muerte de su hija no hacen más que meternos aun más dentro de la historia y provocarnos empatía por ambos personajes. Frases como "el miedo es una elección" - slogan de la película - nos hacen llevarnos un poco más de la sala que el impacto inicial de impresionantes naves, animales salvajes, monstruos asesinos y disparos. After Earth logra combinar algo que en películas de acción parece imposible: una trama de acción con otra de evolución(es) de personaje(s).
En contra
Si uno se entrega a las cartas con la que la película juega, y se deja llevar por la travesía que sus dos personajes deben enfrentar, la historia se hace llevadera y emocionante. Sin embargo, si uno elige ir un poco más a fondo, la trama se cae a pedazos: ¿Por qué si existía la tecnología para evitar ser descubierto por las Ursas (la burbuja que usa el pequeño Kitai en la tragedia con su hermana) los humanos no andan por ahí protegidos por la misma tecnología? ¿Sus trajes ultra tecnológicos no podrían despedir anti-feromonas para no ser vistos? ¿Por qué la tierra es un lugar inhabitable si todo lo que tiene son unos animales medio locos (fácilmente controlables con un par de jaulas), y un poco menos de oxígeno (fácilmente reversible con esos filtros de aire)? ¿Cómo hace el personaje de Will Smith para sobrevivir a semejante caída? Haciéndose estas preguntas comenzada la película, todo parecería ridículo y forzado. Sin embargo, si nos dejamos "engañar" el film presenta una serie de eventos y reglas muy bien utilizadas que sirven para formar un relato coherente y cautivador. También se le puede reprochar la resolución de algún que otro peligro (el asunto con "el salvador" cuando baja la temperatura...) y un final que simplemente cierra, sin mucho más que contar. Y por último, un aspecto discutible: la banda sonora. Por momentos demasiado sentimental, por momentos demasiado épica. Pero que sin embargo no logra sacarnos de la historia. Una historia que tal vez sea demasiado sencilla y que hubiera merecido un poco más de desarrollo para no dejar ese sabor a poco.
Conclusión
No se dejen engañar por la crítica de cine, que parece tener una vendetta personal después de haber visto las últimas producciones de este discutido director Indio. "Después de la tierra" es una película altamente recomendable de principio a fin, con una historia para todos los gustos, y grandes efectos y secuencias. Si "Oblivion" (la comparación es inevitable) era una trama tonta e innecesariamente rebuscada con muy buenos momentos, la que nos ocupa es una historia sencilla y redonda con momentos tontos y rebuscados. Cuestión de gustos. Como bien podría haber dicho el General Raige: "el disfrute es una elección".
Nuestra calificación: ¡Muy buena!
